La gente tiene que espantarse o no reaccionará ante el cambio climático
La comunidad científica estadounidense ya está harta por el desinterés que muestra el mundo ante los efectos del cambio climático. La primavera pasada un grupo de científicos se encadenó a un banco de Los Ángeles en protesta por la falta de acción para enfrentar este fenómeno global, del cual aseguran que se está jugando la sobreviviencia humana en serio.. “Vamos a perderlo todo, y no estamos bromeando”, dijo un manifestante, el Dr. Peter Kalmus. «No estamos mintiendo, no estamos exagerando. Esto es tan malo para todos«.
Lo curioso de esta medida es que tiene lugar en momentos en que el cambio climático afecta de diferentes maneras al mundo. En el estado de Nevada ha estado produciendo sequías, en el Caribe, la sobreproducción de algas asfixia las playas, mientras en Kentucky, las inundaciones crean tragedias constantes. Estos aspectos han llevado a considerar al cambio climático como un efecto “tipo guerrillero”, pues es cambiante toda vez que se le intenta combatir.
La gente no reacciona al peligro ambiental
Kalmus no sólo trabaja para la NASA, sino que es un experto del tema, quien asegura que todos deberíamos estar muertos de miedo por el clima en este momento. “Creo que si tu casa se está incendiando, te entra la adrenalina, te entra el pánico, y eso te salva la vida, porque sales de la casa y apagas el fuego”.
Para él el problema es que el cambio climático no despierta ese índice de sobrevivencia que se espera para actuar. «Quiero que la gente se asuste, sí. No creo que la gente se asuste lo suficiente. No hay suficiente urgencia pública sobre esto», dijo.
Con tal de lograr que nos preocupemos un poco, este hombre de ciencia nos predice cómo serán los veranos venideros en el mundo: el calor viene a la alza y prevé que dentro de veinte años, un verano como este de 2022, que es sumamente caluroso, será uno de los recuerdos más gratos, porque lo que viene superará la temperatura de manera agobiante.
Cambiar combustibles fósiles por energías limpias… ¡ya!
En otra perspectiva, Sarah Burch, autora principal del informe del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático de la ONU, señala que nuestro futuro no sólo es incierto sino, básicamente, sombrío.
Burch asegura que es necesario alejarse de la electricidad producida con carbón y de los combustibles fósiles altamente contaminantes y orientarla hacia la energía solar y eólica. “Sabemos lo que debemos hacer con nuestros edificios para hacerlos más eficientes. Necesitamos aislarlos, debemos calentarlos con bombas de calor en lugar de usar gas natural, carbón y petróleo. Necesitamos usar electricidad limpia y cambiar a vehículos eléctricos”, indicó.
A ocho años de la catástrofe
Faltan sólo ocho años para la meta de la ONU de disminuir el clima en dos grados, pero de lo que está más segura es de que el objetivo no se logrará. En gran parte tiene que ver la falta de claridad en lo que se propone, y que la gente no lograr visualizar por sí misma.
El astrofísico Neil de Grasse Tyson lo explica de esta manera. Según su opinión, esos simples dos grados calientan tanto el clima que se perderían muchas costas del mundo. ¿Y qué creen? Estamos muy cerca de verlo, pues con el deshielo de los casquetes polares, el agua de los océanos subirá hasta el codo izquierdo del brazo que sostiene el libro en la Estatua de la Libertad.
El ejemplo de Venus
Tyson nos cuenta también que Venus podría ser un ejemplo real de hacia dónde va la Tierra. En su libro «Starry Messenger: Cosmic Perspectives on Civilization» (Henry Holt and Co.) comenta que Venus es básicamente del mismo tamaño que la Tierra y pudo haber tenido la misma gravedad superficial que la Tierra, sólo que algo salió mal en ese planeta, pues tiene un efecto invernadero descontrolado con casi 500 mil grados centígrados. Justo para cocinar una pizza de pepperoni de 16 pulgadas en el alféizar de la ventana en tres segundos,
«Pero quiero saber qué perillas giró la naturaleza allí, porque si estamos girando esas mismas perillas en la Tierra artificialmente, eso es malo. Eso no augura nada bueno para el futuro de la vida en la Tierra, pero especialmente para la civilización que se construyó sobre ella los últimos 10.000 años, durante un período de relativa estabilidad en nuestro clima». Tyson agregó: «Todos somos de la misma raza, la raza humana. Y me gustaría pensar que todos podemos unirnos y resolver problemas sin suicidarnos«. puntualizó Tyson.
Con información de CBS News